Los distintos sectores de la UCR provincial están furiosos con Mario Barletta y lo acusan de haber blindado al intendente Juan Pablo Poletti bloqueando el gabinete al resto de los espacios que integraron el Frente Unidos que a nivel provincial lidera Maximiliano Pullaro.
A diferencia del gobernador, que le abrió la participación a todo el radicalismo y partidos que integraron la coalición, Poletti le cedió el armado del gabinete a Barletta y al PRO que responde a la vicegobernadora Gisela Scaglia, pero el histórico dirigente radical fue poco generoso en el reparto de cargos.
De hecho, fuentes del oficialismo que hablaron con LPO señalaron que Barletta puso a una de las hijas en la lista de Conejales y a la otra la nombró funcionaria. A su vez, al esposo de la concejala, Alejandro Boscarol, es el secretario general de la Intendencia.
“Puso a su familia y dejó afuera o con cargos menores al resto de la coalición”, dijeron en el radicalismo de la ciudad enojados con Barletta, pero también con el intendente Poletti. Es que el alcalde viene de la medicina, fue director del hospital más importante de la ciudad y no tiene experiencia política, por lo tanto, le dio las riendas a Barletta que administró Santa Fe desde 2007 al 2011.
A su vez, esta situación tensó la relación con Sebastián Mastropaolo, secretario de Gobierno y dirigente del PRO local, otro de los pilares del armado de Poletti incómodos por el hermetismo con el que se maneja Barletta que se quedó con las áreas que manejan la plata de la intendencia.
“No vemos que haya iniciativa, la gestión es muy pobre”, cuestionaron desde sectores aliados. En consecuencia, el resto del radicalismo referenciado en el gobernador Pullaro, en el ex intendente José Corral y del concejal Leandro González, dejaron a Barletta afuera de la conducción partidaria.
Al frente del comité departamental de la Capital, se eligió a Sergio “Checho” Basile y la delegada en el comité provincial fue designada la presidenta del Concejo Deliberante, Adriana Molina, ambos responden a José Corral.
Además, Barletta tampoco pudo colar ningún nombre de los seis convencionales provinciales del Departamento. Según dijeron fuentes partidarias a LPO, se le ofreció una silla pero el dirigente la rechazó.
Lo cierto es que Barletta se quedó sin representantes en las mesas de conducción de la UCR donde fue elegido en la presidencia el senador de Pullaro, Felipe Michlig.