El brote de dengue ya alcanzó niveles históricos y supera los 180 mil casos, con 129 muertes. Frente a ese cuadro, en la gestión de Axel Kicillof, el ministro de Salud Nicolás Kreplak reclamó que el gobierno de Javier Milei intervenga en la produccion de repelentes.
“Tendría que intervenir el Estado Nacional para aumentar la producción o fabricar. Es difícil porque el mercado no se regula solo, en materia de salud tampoco”, expresó el funcionario bonaerense que contrastó con las acciones de la Provincia, donde se fabrican 10 mil frascos de repelente por semana, los cuales se entregan en operativos territoriales.
Asimismo, Kreplak acusó al gobierno libertario por la tardía puesta en marcha de la campaña de prevención de la enfermedad. “No había que esperar hasta marzo, sino que el 11 de diciembre había que arrancar con un plan de gobierno que tenga como primera emergencia resolver esto”, dijo.
En la provincia de Buenos Aires ya fueron confirmados 97.516 contagiados, mientras que en la Ciudad se acumulan 50.905. El AMBA la región más golpeada por el brote. En ese contexto, Kreplak, acusó: “La Nación no está haciendo nada”.
Esa foto es una de las que más preocupa a los intendentes. Como viene contando LPO, jefes comunales de distintas extracciones sostienen que sus sistemas sanitarios están ingresando en fase crítica.
Ante el aumento de la demanda (en buena medida a raíz del brote de dengue) y el incremento en los costos de los insumos, en algunos casos mantener la capacidad de respuesta del área de Salud municipal les afecte el 40% de sus presupuestos.
Tras haber comenzado la semana pasada con la campaña de prevención en medios, el ministro de Salud nacional, Mario Russo, dijo que la vacuna contra el dengue “no es efectiva para mitigar el brote” y agregó que “harían falta ocho años de inmunizaciones” para combatir la ola de casos.
Mientras el gobierno nacional acusa a la gestión anterior por el pico de casos, en la oposición proliferan los cuestionamientos a la actitud del gobierno libertario frente a esta crisis.
El presidente de la UCR, Martín Lousteau también focalizó en la falta de repelentes y cómo eso provocó una estampida en el precio del producto.
“Tener un Estado grande y deforme es un problema pero caer en la trampa del Estado mínimo como el que le gusta a Javier Milei tampoco es la solución”, dijo el senador radical.
Y agregó: “Por eso, mientras tenemos más de 150 mil contagiados y casi 130 muertos, en Mercado Libre el repelente más conocido en aerosol vale 16.000 pesos en su envase de 60g. Este es justo un caso en donde un buen Estado tiene disponible más información más rápido que el mercado. Y puede ayudar a coordinar respuestas si toma decisiones o comparte la información a tiempo. Se llama política pública de salud”.