Los anuncios rimbombantes de Comité de Crisis, logística, Ejército e inteligencia criminal que enumeró la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, para enfrentar al narcoterrorismo terminó convirtiéndose en la llegada de un puñado de agentes de Gendarmería, Policía Federal y de Seguridad Aeroportuaria que serán destinados al patrullaje de tres barrios calientes de la ciudad.
Los 450 efectivos federales que supuestamente ya están en la ciudad, custodiarán los barrios Tablada, Empalme Granero y Triángulo que, según la versión oficial, se sumarían a los que ya se encuentran en territorio llegando a dos mil gendarmes.
[Los gobernadores cruzaron a Milei que dijo que el problema de los narcos es de las provincias]
Sin embargo, cuando Bullrich fue a recibir a la tropa al ingreso de Rosario para grabar su reel para el Instagram, los medios locales advirtieron que un grupo de patrulleros federales se alejaban de la ciudad y después volvieron a ingresar con el grupo nuevo. Según publicó el diario El Ciudadano, los vehículos que estaban en Rosario se fueron hasta Arroyo Seco y volvieron con la caravana.
En consecuencia, no hay certezas de la cantidad de efectivos que estarán en la ciudad más violenta del país conmocionada por los ataques terroristas que dejaron el saldo de cuatro trabajadores inocentes asesinados.
Pero lo que más preocupa en el gobierno de Santa Fe es la concepción que tiene el presidente sobre el tema que dijo que el problema del narcotráfico es de las provincias y que Nación se limita a “colaborar”. Las declaraciones de Milei enfureció a los gobernadores que firmaron un duro comunicado donde le explican que el combate del narcotráfico es de jurisdicción federal.
Según fuentes del Ministerio de Seguridad nacional que hablaron con LPO, explicaron que en los barrios mencionados serán patrullados exclusivamente por las fuerzas federales mientras que el resto de los barrios de Rosario estarán controlados por la policía santafesina.
Por lo tanto, lejos de constituirse un comando conjunto que coordine acciones entre distintas fuerzas federales y provinciales, como prometió Bullrich, lo que sucederá a partir de este jueves es la división del territorio para cada jurisdicción.