La interna entre el secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo y el ministro Toto Caputo, amenaza con detonar un escándalo de corrupción mayúsculo en el gobierno de Milei. Fernando Olaizola, un hombre de total confianza de Chirillo denunció que el vicepresidente de Cammesa deja correr negociados de miles de millones.
Olaizola es uno de los tantos funcionarios sin cargo que habitan el gobierno libertario y en un comentario en el portal especializado Econojournal, denunció corrupción en la mayorista del mercado eléctrico y apuntó con nombre y apellido al vicepresidente, Mario Cairella, puesto en ese cargo por el ministro Caputo.
“Cómo les cuesta a algunos soltar la teta… se sabe que en los últimos 20 años a Cammesa se le perdieron en el camino algunos miles de millones de dólares que fueron a las manos porosas de algunos funcionarios y sus amigos”, denunció Olaizola y precisó “Chirillo sólo les está cortando el business y obvio todos los viejos enquistados saltan como leche hervida, sobre todo Ruichoto (sic) que redactó este artículo (en referencia a Jorge Ruisoto, director de Auditorías de Cammesa) y se lo pasó al VP Cairella que vino a defender la suya, todos funcionarios millonarios que siguen operando en la prensa para seguir robando. Pronto desfilarán por Comodoro Py.! Viva la libertad!”, posteó Olaizola.
Investigan a un funcionario chileno de Enarsa por la compra de gas a Bolivia y los barcos de GNL
El comentario cobra enorme relevancia porque Olaizola fue quien encausó la negociación con Brasil durante el primer semestre del año para garantizar el abastecimiento de gas del norte argentino a partir de un acuerdo tripartito con Bolivia y Brasil. Incluso viajó a Río de Janeiro el 17 de abril para firmar un memorando con la brasileña Petrobras.
Es decir que en la compra directa de importación de energía participó de las negociaciones una persona sin cargo oficial ni representación alguna, como reveló LPO.
Dato no menor es que el presidente y vice de Enarsa también formaron parte de esa comitiva. El presidente Juan Carlos Dancel Jones y su vice, el chileno Rigoberto Mejía Avena, quien ya había sido funcionario de la empresa durante el macrismo.
Mejía Avena está siendo investigado por por otro memorandum firmado con la brasileña Petrobras, conocido como Swap de barcos de GNL a cambio de gas que se importa de Bolivia a USD 20 por millón de BTU, muy por encima del precio de Mercado.
El ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo.
El problema es que abre un posible caso de conflicto de intereses. Mejía Avena fue director de la petrolera brasileña. Además este funcionario estuvo en el ojo de la tormenta cuando en 2019 durante el gobierno de Macri, un grupo de diputados denunciaron a las autoridades de la estatal de energía por la venta a precio vil de las centrales termoeléctricas.
“Olaizola opera de intermediario para Mejía Avena, indicó a LPO una fuente que conoce muy bien a estos jugadores. Según este ex funcionario la gravedad del caso es suficiente “para que lo impute la justicia en la denuncia por la compra de gas a Bolivia”.
Escándalo: el gobierno cerró sin licitación una polémica compra a Petrobras y pagó el triple “Deberían extender la investigación y analizar la compra del buque de Petrobras, donde saltaron serias irregularidades”, agregó la fuente.
Esta pelea es producto d ela interna feroz que cruza a la Secretaria de Energía. Los Caputo no se rinden y persisten en el take over del área. Santiago respalda a su primo Toto en la pelea y apuesta a poner al sucesor de Chirillo en alianza con los hermanos Neuss y otros empresarios del sector, incluido su tío Nicky.
Esto Chirillo lo sabe. Tal como contó LPO hace un par de semanas atrás apuntó sin mucho disimulo en una conferencia, contra uno de los flancos mas sensibles para el equipo económico: “Lo único que tiene que hacer el Estado es bajar el riesgo país”, lastimó.
La interna viene desde que Caputo obligó a Chirillo a postergar la implementación del hito de su gestión: la canasta básica energética, sin horizonte a la vista. Es de público conocimiento que la política tarifaria se decide en el quinto piso del Ministerio de Economía. Pero además, el ministro encaró en persona la negociación de la deuda con las energéticas, sin darle participación alguna al titular de la cartera.
Como vuelto, y de manera inconsulta, Chirillo avanzo en una desregulación que profundizó el caos en un sector que se encuentra cada vez mas cerca del colapso. La medida enfureció al ministro de Finanzas. La falta de programación para la compra de combustible, aumentó la importación de megas brasileros que valen el triple y se pagan en dólares, ejerciendo una mayor presion sobre las reservas, tal como informó LPO.
En medio de este desconcierto, el macrista Cairella, envió dos cartas y puso a Chirillo contra las cuerdas, como reveló este medio. En una de las notas enviadas por el sistema GDE exige que la secretaría deje por escrito el rol de Cammesa sobre la importación de energía. En la segunda alerta sobre posibles apagones durante el verano.
“La interna en la Secretaría de Energía refleja una guerra mayor, que es la de Sturzenegger contra Caputo. Tanto Olaizola, Mejía Avena como Chirillo forman parte del equipo de Carlos Bastos, el socio de Domingo Cavallo. La tribu de Sturzenegger. El clásico es contra el equipo de Caputo, que sumó a Daniel Gonzalez. Ambos mantienen vínculos con Cairella desde la gestión macrista”, explicó a LPO un importante empresario del sector.
