La renuncia de una funcionaria que había llegado al Gobierno de la mano de Dante Sica dejó en un lugar incómodo al secretario de Trabajo, Julio Cordero.
La turbulencia del ministerio de Capital Humano ya se llevó puesto al secretario de Niñez, Pablo de la Torre, a la mano derecha de Sandra Pettovello, Fernando Szeressevsky y amenaza al secretario de Educación, Carlos Torrendell.
Ahora Cordero, el encargado de la otra área de peso, busca evitar olas para sobrevivir a la crisis en la que cayó el ministerio de cuatro cabezas que le armaron a Pettovello.
Pero salida de una protegida suya lo complica. Se trata de Josefina Sanz, que renunció a la secretaria de Simplificación de la jefatura de gabinete, como otro coletazo de la caída de Nicolás Posse.
Sanz había llegado a la jefatura impulsada por Dante Sica, el ex ministro de Trabajo de Mauricio Macri que trabajó en la campaña de Patricia Bullrich y por eso pudo opinar al momento de armar el gabinete.
El temor de Cordero, que viajó a la cumbre de la OIT en Ginebra, es encontrarse con sorpresas a su regreso.
