El ministro del Interior, Guillermo Francos, dijo que la Casa Rosada “apoya” al gobernador de Misiones, Hugo Passalacqua, en el conflicto con policías y docentes, aunque reiteró que Nación no intervendrá para encontrar una salida.
“Yo conversé con el gobernador, por supuesto, en estos días dos o tres veces. Nos pusimos a disposición. Es un tema al que claramente tiene que buscarle una solución la provincia, el Gobierno no puede meterse a tratar de solucionar los problemas porque ellos tienen sus metodologías, sus formas”, indicó Francos.
“El gobernador Passalacqua sabe que cuenta con nuestro apoyo si necesita algo. Tenemos mucha conversación, mucho diálogo y hemos estado en todo tiempo dispuestos”, completó Francos.
Escala el conflicto en Misiones y escrachan la casa del gobernador Passalacqua
En Misiones admiten que Francos ha estado dispuesto a ayudar, pero ponen en duda que el resto del gobierno nacional actúe de la misma forma. De hecho, ven a sectores libertarios de la provincia agitando la protesta policial.
En el oficialismo misionero apuntan al legislador Pedro Puerta, que hace poco se sumó a La Libertad Avanza. El hijo del ex presidente interino Ramón Puerta es el líder del partido Activar que cuenta con una diputada nacional que acaba de sumarse a LLA.
En Misiones dicen que Puerta está detrás del vocero de la protesta policial, Ramón Amarilla, que lidera el sector más duro y ha sido el encargado de rechazar todas las ofertas salariales. Puerta es parte del armado neomenemista de LLA en las provincias, liderado por Eduardo “Lule” Menem.
En el espacio de Passalacqua también remarcan que los medios nacionales más cercanos al gobierno de Milei han agitado fuerte la protesta, un factor que suman a la desconfianza sobre las buenas intenciones de la Casa Rosada.
En Misiones también afirman que a la protesta se sumó en los últimos días un grupo de personas que llegó desde Buenos Aires y que habría sido parte de los incidentes del jueves por la noche en la Legislatura.
En esa marcha del jueves los legisladores del PRO, Horacio Loreiro, y de la UCR, Ariel Pianesi, se fueron de la sesión y salieron a respaldar a los manifestantes, pero terminaron siendo insultados. “Le votaron a Milei la ley, hijos de puta”, le recriminaron.
