La Universidad Nacional de Córdoba, de manera orgánica y formal, repudió el accionar de los diputados nacionales que “con su voto colaboraron con el desfinanciamiento” del sistema universitario al convalidar el veto de Javier Milei, a quien le reprocharon “los discursos y aciones mentirosas y ultrajantes”, en el marco de la escalda del conflicto universitario.
La declaración de repudio del Consejo Superior de la UNC hacia los diputados nacionales -“en particular a los graduados y docentes en ejercicio en las universidades públicas”- no es menor porque lleva la autoría de la Franja Morada, la agrupación política mayoritaria en la Casa de Trejo, y, por lo tanto, la que comanda la mayoría de los centros de estudiantes, decanatos y el rectorado.
El rector Jhon Boretto, quien a mediadios de los 90 fue presidente de la Federación Universitaria Córdoba, durante el conflicto con el menemismo por el arancelamiento universitario, presidió la sesión del Consejo Superior de la que emanó el repudio a los diputados nacionales.
Boretto definió las actuales “circunstancias como críticas” y vaticinó que será un “conflicto largo” con el Gobierno de Javier Milei. “Me enorgullece que las diferencias que existen en el ambito de la universisda,d y que forman parte de la naturaliza de una institución democrática, sea capaz de construir este consenso”, dijo Boretto refiriéndose al texto de repudio al veto; y anticipó que habrá “más acciones” para “conseguir un presupuesto digno y que represente una recuperación salarial”.
“La educación pública y la ciencia tienen un valor estratégico fundamental para el desarrollo del país; no se trata de un reclamo sectorial o corporativo, sino de revalidar nuestro compromiso con la comunidad a la que pertencemos y que sostiene con sus impuestos un modelo identitario de nuesro país”, dijo Boretto al cerrar el debate.
Aunque cuidadoso para no “caer en vulgaridades”, el documento en contra de los diputados también tiene un reclamo directo a Milei: “Rechazamos los discursos y acciones mentirosas, ultrajantes y amenazantes, y el continuo hostigamiento que busca desprestigiar la comunidad universitaria y el sistema de ciencia y tecnología”, dice el repudio formal.
Al cruce del Presidente, el documento de la UNC sostiene: “La educación universitaria representa una herramienta crucial para la construcción de una sociedad más justa, equitativa y con igualdad de oportunidades”.
La Franja Morada y el esquema de Martín Llaryora coordinan acciones para deslantentar la toma de facultades, no por apoyo a Milei, sino porque el clima de época es refractario a esa medida. De hecho, este martes la Universidad de Río Cuarto, de donde egresó Piera Fernández, la titular de la Federación Universitaria Argentina, rechazó la toma; y lo mismo pasó en la Facultad de Derecho de la UNC, bastión de la Franja Morada pero donde el llaryorismo tiene ascendencia.
