Durante la apertura de sesiones ordinarias del Congreso de la Nación, el presidente Javier Milei sorprendió al anunciar el cierre de la Agencia Nacional de Noticias Télam, que tiene 78 años de historia en el país. La agencia, creada con el objetivo de difundir información federal y pluralista, ha sido objeto de controversia debido a su presunto uso como instrumento de propaganda política.
Milei, en su discurso, argumentó que Télam ha sido utilizada como “agencia de propaganda kirchnerista” en las últimas décadas, justificando así su decisión de cerrarla. Este anuncio reaviva viejas discusiones sobre la libertad de prensa y el rol del Estado en los medios de comunicación.
La agencia, que cuenta con más de 700 empleados y una red de corresponsales en todas las provincias argentinas, ha enfrentado desafíos en el pasado durante los gobiernos de Menem, De la Rúa y Macri, incluyendo intentos de liquidación y despidos masivos.
Por otro lado, la comunidad sindical y diversos sectores expresaron su rechazo al cierre de Télam, defendiendo su importancia como un patrimonio público y un pilar de la soberanía nacional.
