Javier Milei armó una cumbre con los gobernadores héroes del peronismo para no quedar tan reglado frente a Mauricio Macri. Fueron invitados Osvaldo Jaldo, Raúl Jalil, Gustavo Sáenz y Hugo Passalacqua. El gobernador de Tucumán, en alerta ante la reacción popular, aún no confirmó su asistencia.
Milei le terminó pagando muy cara a Macri su ayuda con veto al aumento universitario. Los diputados del PRO fueron clave para defender al oficialismo, pero no hubieran sido suficientes sin los 12 legisladores provinciales que se abstuvieron o votaron en sintonía con el gobierno. Sin embargo, Macri se quedó con el manejo total de la Secretaría de Energía y otros negocios millonarios.
El presidente fue sorteando las diferentes crisis de gobierno con acuerdos puntuales. El dilema oficialista siempre fue si cerrar un frente con el peronismo o arrojarse a los brazos de Macri. Milei eligió la más cara de las soluciones: le entregó las principales áreas al ex presidente, pero sin cerrar un acuerdo de gobernabilidad. Por eso, cada vez que el PRO presta su ayuda, Macri pasa por caja.
Como contó LPO, el líder del PRO se quedó con los negocios, con Energía, Trabajo, Cancillería, además de Economía y el Banco Central. Le dejó a Milei los polvorines de Salud, Educación y Desarrollo Social.
La lógica pendular de Milei hizo que, tras la confirmación del veto, el presidente buscara una foto con los gobernadores peronistas, una imagen para mostrar una independencia del macrismo que aún no consiguió.
El talento de Macri para venderle a los libertarios victorias propias que en realidad son compartidas sigue intacto. Los tres diputados misioneros y los tres tucumanos que salvaron el veto son la mejor muestra.
Luego de las críticas por el asado a los 87 héroes, el gobierno eligió una celebración más modesta. El problema es que algunos de los gobernadores que sostuvieron el veto todavía tienen temor por las reacciones en sus provincias. Esa es la principal razón que hace a Jaldo dudar de la conveniencia de una foto con el presidente.