El 6 de agosto están previstas elecciones en el Sindicato de Seguridad Privada (Upsra), el gremio que Ángel García maneja hace más de 40 años con puño de hierro. Luego de muchas idas y vueltas, Gutiérrez logró que la Secretaría de Trabajo le permita competir en las elecciones del sindicato.
García había impuesto su peso y la Junta Electoral del Sindicato había “bajado” todas las listas opositoras con diferentes argumentaciones.
Gutiérrez acusa a García de haber usado el sindicato para alimentar sus propios negocios propios y le atribuye un “cero” en gestión para los trabajadores de la seguridad. “No tenemos ningún beneficio social ni recreativo”, comentan cerca del ministro.
“La cantidad de afiliados creció en los últimos años, pero hubo un deterioro en las condiciones laborales y salariales de la actividad con escenarios de explotación laboral en distintos puntos del país. Basta con identificar las garitas de los vigiladores para comprobar la deplorable situación de los afiliados”, agregan cerca de Gutiérrez.
Otro punto flaco de la gestión de García es la obra social de los vigiladores, que prácticamente no brinda prestaciones. El servicio de la OSPSIP es tan malo que la mayoría de los afiliados al gremio piden la derivación de sus aportes a otras obras sociales.
Angel García, histórico líder del sindicato de seguridad privada.
Hasta 2009, Upsra tenía la representación total de los trabajadores vigiladores, a excepción de la provincia de Córdoba , pero ese mismo año comenzaron a surgir otras entidades sindicales frente a la decadencia del sindicato madre.
El primero en aparecer fue Sutcapra, el sindicato de los trabajadores de seguridad en boliches y recitales, que empezó a acaparar uno de los sectores olvidados por el gremio de García. Luego nació Upsap en la Patagonia, Uesevi en Rosario y el Ssip en Bahía Blanca. Hoy son tantas las agrupaciones y sindicatos de seguridad, con simple inscripción, que sería imposible enumerarlos a todos.
La oposición de Gutiérrez denuncia que ante el deterioro del poder sindical, García eligió resistir en base a una alianza con barras, que hoy forman parte de la conducción del gremio. Es el caso de Miguel Tobar, hermano de Iván Tobar, oponente del “Pata” Medina en UOCRA La Plata y jefe de Los Leales del club Estudiantes de La Plata.
“Fue Tobar, junto a una facción de la barra de River Plate al mando de Ariel «Pato» Calvici, quien aseguró la asamblea electoral de la Upsra en noviembre en el recreo que el gremio tiene en Moreno. Los barras impidieron que entrase un afiliado que pudiera discutirle algo a García”, señalaron a LPO cerca de Gutiérrez.
